En los últimos años se ha profundizado cada vez más en
el estudio de la actividad física, tanto en los efectos saludables de su
práctica habitual como en la relación que su ausencia mantiene con el
desarrollo, mantenimiento y agravamiento de diversas enfermedades crónicas en
especial con la diabetes mellitus tipo 2.

En las tres últimas décadas el abundante análisis
epidemiológico de la actividad física ha alcanzado conclusiones muy importantes
acerca de los beneficios de su práctica regular. A pesar de ello, la
prevalencia de estilos de vida sedentarios sigue aumentando, por lo que son necesarias
intervenciones de promoción de la actividad física que permitan alcanzar el
objetivo de realizar al menos 30 min de actividad física de intensidad moderada
en por lo menos 5 días de la semana.
La actividad física tiene un valor muy importante en
la mejora del control de glucosa en sangre para los diabéticos.
Al realizar actividad física
se obstinen varios beneficios para la salud del enfermo con diabetes el más
importante la pérdida de peso, esto va a reducir los riesgos de alteraciones de la diabetes
tipo 2.
Hay estudios que revelan que la actividad física
regular podría prevenir y retrasar la
diabetes y sus complicaciones. Sin embargo mucha población hoy en día, y aun
sabiendo los beneficios del ejercicio, no realizan ningún tipo de actividad por
diversas razones socioculturales.

La DM2 ocurre más frecuentemente en poblaciones con
hipertensión o dislipidemia.
Existen estudios que señalan que muchas personas con
diabetes tipo 2 pueden controlar la enfermedad con solo una dieta adecuada y
ejercicio. Sin necesidad de ingerir tanto medicamento.
Efectos del ejercicio:
El ejercicio en caso de personas que tienen
hiperglucemia es muy efectivo ya que ejercitarse hace que se produzca una
hipoglucemia y esto se compense.
Tanto el ejercicio aeróbico y ejercicios de
resistencia mejorar la acción de la insulina, el control de glucosa
en sangre, la oxidación de grasas y almacenamiento en el músculo.
Sin embargo si una persona realiza ejercicio físico, y
es diabético, es necesario consultarlo con su médico, tanto el tiempo como la
frecuencia del ejercicio y qué tipo de ejercicios realiza. Para recibir
indicaciones de cuanto medicamento suministrar ya que es probable que reduzca
la dosis del medicamento prescrito.
Además se ha comprobado que el ejercicio tiene
beneficios psicológicos en personas con diabetes tipo 2. La enfermedad por si
sola atrae una depresión al ser diagnosticada. Cuando la persona comienza a
realizar ejercicio pierden peso, sirve tanto para distracción como para subir
el autoestima de la persona y así mejorar la calidad de vida.

La diabetes tipo 2 también está aumentando
en prevalencia en los niños y adolescentes, con un
comportamiento cada vez más sedentario y
la obesidad como factores
clave.
Para prevenir DM2 en jóvenes
y niños se recomienda:
- Limitar los tiempos que tienen para ver televisión
- Limitar los tiempos para usar la computadora y jugar videojuegos
- Tener una alimentación balanceada que incluya todos los grupos de alimentos
- Preferir las bebidas de frutas naturales
- Cuidar el consumo de comida poco saludables
- Incentivarlos para realizar actividad física por lo menos 5 días a la semana

Las mujeres diagnosticadas con Diabetes gestacional tienen sustancialmente
mayor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, por lo tanto, el ejercicio
puede ser considerado como una herramienta para prevenir tanto la diabetes gestacional y, posiblemente, DM2 en una fecha posterior.
puede ser considerado como una herramienta para prevenir tanto la diabetes gestacional y, posiblemente, DM2 en una fecha posterior.
La recomendación es realizar: 30 min al día de actividad moderada (caminar)
En conclusión el ejercicio juega un papel
importante en la prevención y el control de resistencia a la
insulina, prediabetes, diabetes gestacional, diabetes tipo 2, y
podemos decir que tanto el ejercicio aeróbico como el de resistencia mejoran la
formación de acción de la insulina y puede ayudar con la gestión de los niveles
de glucemia, lípidos, presión arterial, la mortalidad y la calidad de vida.
El ejercicio debe llevarse a cabo con regularidad y tener
un seguimiento y una rutina de ejercicios. Las personas con diabetes tipo 2 pueden realizar ejercicio
en forma segura, siempre y cuando se tomen ciertas precauciones como la de
consultar la dosis del medicamento con su médico. Es
así pues como concluimos que la implementación de un programa de
ejercicio es fundamental para una salud óptima en las personas
con DM2.
con DM2.
Karla Ivett Torres Martinez
Maestría Nutrición Clínica
Universidad Autónoma De Durango
Campus Zacatecas