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Probioticos y diarrea


PROBIOTICOS Y DIARREA

Realizado por: Adriana Del Carmen Hidalgo Rodríguez

Publicado en: Blog http://nutricioninfo.blogspot.mx/?m=1

Fecha de publicación: 25-octubre-2013

Resumen

Por su alta prevalencia, las enfermedades diarreicas representan un problema de salud pública. En su mayoría son enfermedades prevenibles, pero que al no ser debidamente tratadas representan una de las principales causas de mortalidad a nivel mundial, sobre todo en niños menores de 5 años.
Dentro de las principales medidas para el tratamiento de la diarrea  encontramos hidratación y alimentación adecuada, el uso correcto de antibióticos y enfermedades de tipo inflamatorio intestinal. Sin embargo, el termino probiotico es muy amplio, ya que puede referirse a cualquier microorganismo vivo que al consumirse en dosis y cantidad suficiente ocasiona un beneficio a la salud; sin hacer distinción entre los diferentes microorganismos y las diferentes enfermedades.

Abstract
Because of its high prevalence, diarrheal diseases are a public health problem. They are mostly preventable diseases, but not being properly dealt with are a major cause of mortality worldwide, especially in children under 5 years.
Among the main measures for the treatment of diarrhea found hydration and adequate nutrition, the proper use of antibiotics and of inflammatory bowel disease. However, the term probiotic is very broad because it can refer to any live microorganism which when consumed in sufficient doses and causes a health benefit, without distinction between different microorganisms and different diseases

Palabras clave: probioticos, diarrea, prevención, tratamiento

Introducción

La diarrea la definimos como el cambio en el tránsito intestinal de un individuo, caracterizado por un aumento en el contenido liquido, en el volumen y en la frecuencia de las deposiciones. La organización mundial (OMS) de la salud la define como la deposición de tres o más veces al día de heces blandas o liquidas, aclarando que la deposición frecuente de heces de consistencia solida no es diarrea, ni tampoco la deposición de heces de consistencia suelta y “pastosa” por bebes amamantados.
Algunos estudios han demostrado que los probióticos pueden ayudar a prevenir o tratar la diarrea, incluyendo la diarrea asociada a antibióticos (que ocurre cuando los antibióticos afectan el balance de bacterias en su cuerpo) y la diarrea del viajante (que resulta por la ingestión de alimentos o agua contaminada).Los probióticos que son efectivos para manejar la diarrea son no patogénicos, lo que significa que ellos no causan enfermedades. Ellos también actúan contra las bacterias causantes de la enfermedad de una forma diferente a la forma en que actúan los antibióticos, y comienzan a tener efecto más rápidamente. Para ser efectivos contra la diarrea, los probióticos también deben ser capaces de sobrevivir en el ácido gástrico y la bilis
Desarrollo

A grandes rasgos, las diarreas las clasificamos por su causa en:
a)    Las de origen infeccioso, que pueden ser causadas por virus como rotavirus; por agentes bacterianos como eschericha coli enterotoxigencia, salmonella, shigella , yersnia, clostridium, campylobacter, o por parásitos como cryptosporidium y guardia;
b)    Las diarreas asociadas con cambios en la presión osmótica intraluminal por medicamentos, alimentos o sustancias irritantes;
c)    Las diarreas asociadas al aumento en la perístasis intestinal debido a una hipersensibilidad visceral asociada a factores ambientales como estrés, abuso de alcohol, procineticos, intolerancia a los alimentos, y algunos laxantes.
d)    Las diarreas de tipo exudativo debido a daño estructural en el epitelio intestinal por enfermedades de origen autoinmune como enfermedad de crohn, la colitis ulcerosa, o debido a una reacción alérgica.
e)    Las diarreas de origen iatrogénico como la enteritis por radiación o por infecciones nosocomiales.
en México, de acuerdo a la encuesta nacional de salud y nutrición del 2006, la diarrea de origen infeccioso es un problema de salud pública que afecta a casi el 13% de los niños menores de 5 años y que, en conjunto con las infecciones respiratorias y la desnutrición, ocasiona el 15% de los fallecimientos en los menores de un año de edad, por lo que su prevención y tratamiento oportuno puede evitarse millones de muertes sobre todo en niños con desnutrición o en sujetos inmunocomprometidos con deshidratación severa.
Entre las principales medidas que se proponen para el tratamiento de la diarrea se encuentra:
-la correcta administración de líquidos y el uso de “vida suero oral” que contiene sales minerales y glucosa; y que si no se tiene disponible, se puede elaborar de manera muy simple en el hogar mediante: 1 litro de agua potable, ½ cucharadita rasa de sal, y 8 cucharaditas de azúcar; o mediante 1 litro de agua, ½ cucharadita rasa de sal y 8 cucharaditas rasas de harina de arroz después de hervirse por 5 a 7 minutos.
·      El consumo de cereales refinados y alimentos ricos en fibra soluble como plátano, arroz, avena, pan tostado, manzana, zumos de fruta debido a que han demostrado disminuir el periodo de duración de la diarrea
·      El uso de suplementos de zinc, que de acuerdo a la OMS puede reducir en un 25% la duración de los episodios de diarrea y en un 30% el volumen de las heces.
·      El consumo de frutas y verduras ricos en vitaminas y nutrimentos inorgánicos, sobre todo alimentos ricos en vitamina A en diarreas crónicas.
·      La precaución en el consumo de alimentos ricos en fibra insoluble como cereales integrales, leguminosas, en el consumo de alimentos irritantes como café, alcohol y chile y en alimentos productores de gas como brócoli, coliflor, col de bruselas y leguminosas.
·      La identificación de factores etiológicos, el adecuado uso de antibióticos y la identificación de los factores de riesgo para el desarrollo de complicaciones. A la par de esto, recientemente se propone el uso de probioticos como una terapia complementaria en el tratamiento de la diarrea debido al efecto beneficioso que ocasionan en la salud humana cuando colonizan el intestino y en la reinstauración de la flora intestinal, pero ¿Qué son los probioticos? ¿son todos iguales? ¿Cómo pueden ayudar a la prevención y el tratamiento de la diarrea?

2. ¿Que son los probioticos?

El termino probiotico, se deriva del (del latín “pro”=a favor de y “bios”=vida) y se introdujo por primera vez en 1965 como una contraposición al termino antibiótico por lily y stilwell, quienes acuñaron el termino para referirse a “todo microorganismo que promueve el crecimiento de otros organismos”. Actualmente, la organización mundial de la salud se refiere al termino probiotico para mencionar a todo conjunto de microorganismos vivos y viables que consumidos en cantidad suficiente-como un producto o un preparado- confieren un beneficio a la sala del huésped.
Dichos microorganismos, pueden ser bacterias, hongos y levaduras; y se denominan con base en el género, la cepa y la especie a la cual pertenecen mediante una clasificación alfa-numérica acordada por la comunidad científica. Hecho que es preciso conocer antes de brindar recomendaciones especificas de su consumo, debido a que diferentes cepas y especies podrían tener diferentes efectos en la salud de quien las consume.
Actualmente se propone que para que un microorganismo pueda ser postulado como probiotico debe cumplir por lo menos con lo siguiente:
·      Ser integrante normal de la micro flora intestinal humana y haber demostrado su inocuidad en estudios controlados en humanos.
·      Ser resistente al proceso de digestión y a la degradación causada por los jugos gástricos y la bilis.
·      Tener la capacidad de adherirse a la pared epitelial y colonizar el tracto gastrointestinal o a una cavidad humana- como la vagina y las vías urinarias.
·      Tener influencia en la actividad metabólica local mediante la fermentación de sustratos como la fibra y la producción de ácidos grasos de cadena corta.
·      En el caso de productos comerciales, demostrar su estabilidad en el vehículo en el cual se incluyen y considerar la viabilidad de los microorganismos hasta el final de la vida de anaquel indicada por el fabricante.
·      Contar con información científica que demuestre los beneficios en la salud cuando se consume en cantidad suficiente
Los géneros más utilizados que cumplen con las características anteriores corresponden al grupo de lactobacilos, bifidobacterias, estreptococos, y levaduras como saccharomyces. Recientemente también se han estudiado las fusobacterias y las actinobacterias. Dichos organismos las podemos encontrar en productos lácteos fermentados, en alimentos adicionados con probioticos, liofilizados, como tabletas, capsulas e inclusive en preparados congelados y en la leche materna, aunque no  en todos ellos están presentes en cantidades suficientes

3. ¿cómo pueden beneficiar en el tratamiento y la prevención de la diarrea?

Hablando específicamente de diarrea, se propone que el consumo de probioticos puede ayudar a disminuir la intensidad, la duración y la aparición de diarrea de origen infeccioso, diarrea asociada al uso de antibióticos, diarrea asociada al uso de radioterapia y las asociadas a enfermedades de tipo inflamatorio intestinal. Entre los mecanismos de acción propuestos para dicho fin se encuentran:
a.    La creación de una biocapa que fortalece el efecto de barrera de la mucosa intestinal y que por lo tanto inhibe la adhesión de bacterias enterotoxigenicas.
b.    La reducción del pH intestinal ocasionando un medio menos propicio para la colonización de virus y bacterias.
c.     La producción de sustancias bactericidas como los ácidos orgánicos (acido láctico, acético y butírico)
d.    La regulación de la motilidad intestinal evitando el depósito de bacterias y virus al tracto gastrointestinal
e.    La estimulación de la proliferación de macrófagos y  las células NK (natural killer), así como también la proliferación de linfocitos y el incremento en la secreción de inmunoglobulinas A (IgA) mejorando la respuesta del sistema inmunitario.
Cabe mencionar, que la restauración de la microbiota intestinal puede auxiliar la síntesis y absorción de nutrimentos como vitamina K, piridoxina, cianocobalamina, biotina y acido fólico; disminuyendo la probabilidad de desarrollar deficiencias de micronutrimentos en diarreas de tipo crónico.

4. ¿cuáles son las pruebas?

En cuanto al tipo de cepas estudiadas para prevenir o tratar diarreas, la mayoría de los estudios favorece al uso de lactobacilos y levaduras.
A continuación se hace una breve mención sobre las aplicaciones clínicas en las cuales la administración oral de una cepa específica de probioticos ha demostrado ser eficaz y beneficiosa con por lo menos un ensayo clínico controlado:
a.    Como tratamiento de diarrea agua. De acuerdo con las guías practicas de la organización mundial de gastroenterología, se ha probado que el uso en conjunto y por separado de cepas probioticas como L. reuteri ATCC 55730, L. rhamnosus GG, L. casei DN -114 001, Saccharomyces cerevisiae (boulardii) sirve para reducir la intensidad y acortar la duración de la diarrea infecciosa en niños de 1 a 2 días. Existen meta análisis que apoyan estos resultados y que mencionan que la información sobre la eficacia y seguridad del uso de probioticos para el tratamiento de diarreas infecciosas es mucho más consistente para las diarreas de origen viral en comparación con las de origen bacteriano o parasitario. En infecciones ocasionadas por rotavirus, el uso de una mezcla de cepas de lactobacillus rhamnosus GG, L. casei shirota, L. reuteri, L. acidophilus spec; Bifidobacterium animalis ssp, lactic BB-12 mostro disminución en la duración del cuadro infeccioso, además de incrementar la producción de anticuerpos específicos para dicho virus.
b.    Como tratamiento de diarrea asociada en el uso de antibióticos. El lactobacillus rhamnosus GG y la levadura saccharomyces boulardii, se han propuesto como las cepas con mayor información en cuanto a la disminución en la duración y la severidad de efectos adversos ocasionados por el tratamiento como ampicilina y cloxacilina; además de que un estudio en pacientes adultos hospitalizados, la administración de L. casei DN-114 001 demostró ser eficaz para la prevención de diarrea asociada a los antibióticos y para la diarrea por C. difficile toxigenica.
c.     Como prevención y tratamiento  de diarrea asociada a daño en la mucosa y el epitelio intestinal. En cuanto a la diarrea asociada a la enfermedad inflamatoria intestinal y a la inducida por radiación se ha probado el uso de un simbiótico (probiotico+prebiótico) conocido como VSL#3 que contiene una mezcla de L. acidophilus, lactobacillus bulgaricus, lactobacillus casei y lactobacillus plantarum, bifidobacterium breve, bifidobacterium infantis y bifidobacterium longum y la levadura S. thermophilus; el cual ha demostrado en ensayos clínicos controlados que puede ayudar al mantenimiento de la remisión de la enfermedad inflamatoria intestinal en niños y adultos, pero no ha demostrado un beneficio para el tratamiento de diarrea inducida por radiación. Por otra parte, la cepa E. coli nissle ha demostrado ser el equivalente a la mesalazina en el mantenimiento de la remisión de la colitis ulcerativa crónica idiopática; aunque no ha demostrado beneficio para el mantenimiento de la remisión en la enfermedad de crohn.
d.    Tratamiento de diarreas por intolerancia a la lactosa. El uso de streptococcus thermophilus y el L. delbrueckii subsp. Bulgaricus han demostrado que mejoran la digestión de la lactosa y por tanto reducen los síntomas asociados a su intolerancia.
e.    Tratamiento de diarrea en pacientes con VIH/SIDA. No se cuenta con datos clínicos que muestren el efecto y la seguridad de la administración de probioticos en sujetos con compromiso del sistema inmunitario e inclusive se ha sugerido sobre el posible riesgo de traslocacion bacteriana en sujetos con inmunocompromiso severo.

Discusión y conclusiones

El uso de probioticos representa una alternativa que no puede descartarse como tratamiento complementario para la diarrea sobre todo de origen viral, asociada al uso de antibióticos y para el mantenimiento de la remisión de episodios en colitis ulcerativa. Dentro de los principales efectos observados se encuentra la disminución en el número de días con diarrea, la intensidad de la misma y los síntomas asociados. Por otra parte, el uso de probioticos tiene un efecto directo en la reforestación de la microbiota intestinal y por tanto sobre el sistema inmunitario. En cuanto a la dosis sugerida, mucho depende del tipo de cepa estudiada, sin embargo podríamos sugerir de forma general, que el producto debe contener como dosis, la cual deberá consumirse 2 veces/día. No obstante, algunos productos han demostrado ser eficaces a niveles más bajos, mientras que otros requieren cantidades mayores por lo que la dosificación debe estar basada en estudios en esta área, ya que la flora intestinal es un ecosistema complejo del que desconocemos todo aquello que no es posible cultivar en el laboratorio y en el que la interacción entre géneros y especies de microorganismos, así como la interacción de los genes de la bacteria con los genes y el metabolismo del sujeto que los consumen son poco conocidos.


FUENTES BIBLIOGRAFICAS

Elisa Gómez reyes (Diciembre 2011) “cuadernos de nutrición”, México, D.F., Vol. 34, pp. 217-225


http://nurse-practitioners-and-physician assistants.advanceweb.com/SharedResources/Downloads/2009/011209/NP_Oct08_Probioticos_sph.pdf